A las personas mayores no hay que explicarles que es la sostenibilidad, ni cuales son los objetivos de desarrollo sostenible, porque nos los llevan enseñando a nosotros desde que eramos pequeños.
Frases como: ”Cierra el grifo, apaga la luz, la comida no se tira, la naturaleza se cuida, la avaricia rompe el saco, comparte lo que tienes, no derroches, guarda para mañana, cuida tu salud, trata a los demás como te gustaría que te trataran, practica la justicia y la igualdad, la unión hace la fuerza, más libros, más libres…” nos las han repetido una y mil veces. Porque siempre se han negado a aceptar que lo que nosotros llamamos “progreso” implicase tener que renunciar a esta forma tan elemental de cuidado de las personas y de la naturaleza, que ellos a su vez habían aprendido de sus padres y sus abuelos.
Esta visión del cuidado y del respeto de las personas mayores pone de manifiesto la necesidad urgente que tenemos como sociedad de retomar una conciencia universal más respetuosa con la vida.